Un poco de mi vida

- VIAJERO EN LETRAS - Escribir es más fuerte que uno. No recuerdo desde cuando lo hago... creo que es una extensión del habla. Es darle a ésta el peso de lo tangible sin restarle a la ligereza de su esencia. En ese sacrificio de acento y entonación, nace un trazo de tiempo. Se corre el gusto de escribir, como siempre lo he hecho, volando las letras y notas sin aplicarles destino. Son flechas lanzadas sin amarres, sin fricción ni dirección, solo por el placer de estirar el arco, sentir la fuerza y ese alivio indescriptible al contemplar su vuelo. Desde artículos científicos, capítulos de libros o tesis de administración, hasta cosas más serias e importantes como los cuentos para niños... las flechas siguen volando, pasando por canciones, ensayos y hasta e-mails que no han sido demandados. Esa inercia de la escritura permite a un pedazo de papel, una melodía, o un libro, apropiarse de un parte de uno mismo. Escribo poco, y consciente estoy, sin pizca de extraordinari

- ALFOMBRA Y LUZ - En mí han cruzado expresiones de todos colores, desde el rojo carmín del mayo, hasta un nostâlgico azul de octubre. Un instante sobra para conocerme, y una vida para expresarme y brindarme. Sencillo y cíclico, sirvo de alfombra para plasmar la charla de un maestro y alumno, donde el improvisado poeta busca la oportunidad de nacer. La igualdad de tantos queda contenida en mis ejes. No respeto el tiempo, la cultura, ni el sexo. Trasporto de todo: un leve roce o un choque de madrugada. Basto para jugar y divertirse, o sólo para permitirte ser quien eres. Infinito en alcance, tiempo y uso, búscame en el fondo del barrio, donde aún queden restos de bohemia. Allí entre amigos, acércate libremente y solo pregunta por aquel que conocen como " El Círculo de Sol ".